jueves, 29 de octubre de 2009

Señoras y Señores Lectores:

Hoy, luego de varios dias de ausencia, me dispuse ingresar a mi blog para dar cuenta de si había algún comentario nuevo o alguna novedad. Al entrar me encontre con una avalancha de conceptos "basura", o votos "no positivos", como gusten llamarlo segun su ideología, y respecto a esta actitud propongo a cada cual que ingrese y se encuentre en desacuerdo con mi forma de escribir o los temas elegidos que deje algún comentario manifestando que le parece mal. Creo que de esta manera podré hacerlo mas a gusto para todos, en el caso contrario me veo en la obligación de pensar que me encuentro ante algún mediocre ignorante que no entiende lo que escribo, y que su cobardia le impide darse a conocer. Quien se de por aludido absténgase de esconderse.

jueves, 22 de octubre de 2009

Intempestiva existencia

Por Damián Duarte //


"La existencia precede a la esencia, el hombre es responsable de lo que es. El hombre es lo que él se hace". Esta es la premisa fundamental de la doctrina existencialista, rama de la filosofía que toma como objeto de estudio la individualidad y la subjetividad del ser humano, y que tuvo entre uno de sus mayores exponentes a Albert Camus.

Nacido en tierras argelinas en 1913, el ensayista y dramaturgo fue dueño de algunas de las obras más grandes de la literatura universal. Con un vigoroso y envolvente estilo que las caracteriza, Camus logró focalizar su temática en la absurdidad filosófica, la sensación de alienación y desencanto que padece el ser existencial, de esta forma consiguió plasmar en sus textos lo característico de la doctrina inspirándose en sus lecturas, viajes y experiencias,
A lo largo de su vida, colaboró en una compañía de teatro aficionado que representaba obras de la clase trabajadora, así como también ejerció labores de periodista. Hacia el año 1940, ya instalado en Paris y luego de extensos viajes por Europa, perteneció a la redacción del Paris-Soir y durante la Segunda Guerra Mundial formó parte de la Resistencia como director de una publicación clandestina llamada Combat.
El extranjero (1942), su primera novela de notable influencia existencialista, representa claramente la enajenación del hombre en sí mismo y su indiferencia ante la absurda realidad. A esta publicación la siguieron el ensayo sobre El mito de Sísifo (1942), El hombre rebelde (1951), La caída (1956), y obras teatrales como Calígula (1945) o Estado de sitio (1948), entre otras. Esa intensa oscilación entre el amor y la ansiedad que invade sus textos, lo llevaron, en el año 1957 a que recibiera el premio Nobel de Literatura por “poner de relieve los temas que preocupan hoy”.
Murió en 1960 en un accidente automovilístico y entre sus manuscritos se encontraba inconcluso El primer hombre, obra póstuma de gran contenido autobiográfico publicada en 1955 gracias a la colaboración de su hija.

jueves, 15 de octubre de 2009

Antagónica Comunión

Por Damián Duarte //

¿Que pretende el tiempo de nosotros? ¿Será, quizás, el deterioro o el cambio de las cosas que advertía el Funes borgeano?, ¿Será el aburrimiento “sentir el tiempo”, como decía alguien por ahí?, ¿se relacionará todo esto con la concepción heraclítea de que nadie se baña dos veces en el mismo río?, ¿o simplemente se tratará de una mensura más, parte de la creación del hombre y de una desidia existencial?

El paso del tiempo, tema de discusiones bizantinas, ha atormentado a los seres humanos desde hace varios siglos, desde el conejo de Alicia en el país de las maravillas hasta la inmensa variedad de comidas rápidas de la actualidad.
La idea del eterno retorno, característico del pensamiento griego, grafica un universo circular, el tiempo se emparenta con esta sucesión especializada del movimiento, creando así la noción irrepetible de las cosas. La finitud del ser humano ha sido motivo de preocupación por filósofos y pensadores, interponiendo como objetivo y justificación la eternidad, aunque esta suscite a la mismísima temporalidad.
En nuestros días, es muy habitual encontrarnos con gente que va muy a prisa, desesperada por el ahorro de minutos y hasta obsesionada con el paso de las horas, la pregunta a todo esto es: ¿hacia donde nos dirigimos tan rápido? ¿La eternidad solucionaría los problemas de psicosis temporaria? El calendario, los relojes, o simple tic-tac son los emblemas mas destacados de un renuente pesar que la sociedad acude con gran devoción.
Aquella magnitud física que ordena los acontecimientos en pasado, presente y futuro se encuentra íntimamente arraigada al olvido, la esperanza, la memoria y forma parte de una inigualable abstracción por la cual el ser humano ordena su vida. Si bien el tiempo no asegura el motor de la vida y de las cosas, podríamos decir que sirve como una férrea arma manipuladora y restrictiva de la existencia humana que regula las actividades y que con el avance de la historia ha ido convirtiendo al tiempo en un bien de mercado, victima de las leyes de oferta y demanda, donde el ahorro de algunos minutos resulta de vital importancia para las acciones de las personas.
Dentro de la concepción aristotélica podemos encontrar al tiempo como la medición del movimiento entre el antes y el después. Heidegger, en cambio, lo concibe dentro de su exploración ontológica como el sentido del Ser. Tal como lo establece Jean Paul Sartre, la realidad humana se capta a sí misma como temporal, e interpreta al pasado como una modificación del presente, una huella.
El tiempo nos separa de lo que hemos sido y de lo que seremos, no podemos apartarnos de él, somos parte de él. El hombre como Ser, y el tiempo como ente, se encuentran tan unidos como separados, los diferencia la forma de influir el uno sobre el otro, el tiempo siempre sigue su curso, rara vez se siente modificado por el hombre, que por el contrario, rara vez deja de estar condicionado por el tiempo y sus dimensiones, ya que el presente, que hace instantes era futuro, ahora ya no es más que un mero pasado.

viernes, 2 de octubre de 2009

La insurgencia mediática

Por Damián Duarte //

Los medios de comunicación han sufrido, a lo largo de los años, una serie de variaciones y adaptaciones producto de una constante reformulación en el contexto informativo. La emergencia de los blogs (también conocidos como bitácoras) en el último tiempo ha dado lugar a una serie de debates acerca de la reputación de los mismos con respecto a la veracidad de la información que proporcionan y los temas que son tratados.




Blogs: Voces en la oscuridad


A lo largo de todo el mundo ésta nueva modalidad se ha proliferado fugazmente. Los propietarios de los blogs, ahora dueños de un lugar de expresión, se han convertido en productores y editores de sus de sus propias creaciones, dando lugar así a ciudadanos-periodistas partícipes y narradores de la realidad.

Este medio digital surgió hace poco más de diez años, y originalmente se utilizaba como alternativa para publicar la vida personal de la gente, es decir, algo así como un diario personal online. La popularidad de esta herramienta fue creciendo abismalmente con el tiempo, al igual que su practicidad, en la medida que las personas veían la necesidad de hacer publica sus opiniones, vivencias, o por el simple hecho de sentirse periodistas independientes sin verse sujetos a censuras o a determinado tipo de límite.

Alejandro Spagnoli, creador del blog Héroe del whisky explica que la utilidad que le da a su blog es la de “un espacio para entretenerse, reírse, pensar y reflexionar”, y con respecto al los contenidos advierte: “Un día escribo sobre política nacional o internacional, otro día subo un video divertido de YouTube y al día siguiente pongo un texto que me pareció divertido. Creo que el blog habla un poco de cómo somos nosotros, cada uno pone lo que quiere y trata los temas que quiere como quiere. Lo importante es que le guste al que lo hace”.

Dentro de los pro de este medio Alejandro resalta lo bueno de comunicarse y expresarse debido a que “se puede poner lo que quieras”, pero reconoce que en el lado oscuro del ambiente la no regulación de los contenidos puede “desembocar en cosas como discriminación, mentiras, falacias, información manipulada, etc”.

Si bien no define a un perfil de usuario, admite que según el tipo de blog, éste será más atrayente para un determinado público, en el caso de que “si el blog está más enfocado a la parte política y social va a tener lectores que se involucren en esos temas: desde jóvenes hasta gente grande”, también destaca que si es de cosas mas graciosas o anécdotas personales “los lectores predominantes serán adolescentes”.

Alejandro es estudiante de periodismo y con respecto al futuro de los blogs opina que tal vez se conviertan en algo un tanto masivo y explica que “el espectro de gente que usa la tecnología va aumentando, así que no es raro esperar que se incorpore más cantidad al fenómeno. Es posible que el formato de los sitios vaya cambiando, pero el espíritu seguirá siendo el mismo”.

Con respecto a la competencia con los grandes medios afirma que son cosas diferentes: “La gente sigue comprando el diario de papel, tampoco creo eso que dicen algunos de que el diario de papel va a morir por el diario digital. No es algo cómodo. Los blogs son algo más recreativo o de reflexión, de segunda lectura. Con el diario que comprás a la mañana te enterás de lo que pasa, en cambio con el blog, analizás y sacas conclusiones, aunque sea de noticias. Me parece que la mayoría de la gente sigue usando el diario de papel, la televisión o la radio. Una parte menor, se entera desde las páginas de los diarios, pero es realmente muy poca la gente que se levanta a la mañana y se entera de las cosas entrando a un blog”.

Dante Palma, profesor de filosofía en la UBA, es el mentor del blog El infierno de Dante donde trata temas filosóficos, de política nacional, entre otros. Con respecto a los medios digitales, Dante rescata la “multiplicidad de voces y de medios” así como también la “posibilidad de que te lea mucha gente”, pero acentúa como contra “la impunidad del comentador. En el anonimato cualquiera te insulta y opina con un nick, cualquiera puede publicar cualquier cosa sobre vos”. El profesor advierte sobre la tendencia a que la gente lea y se informe por internet, y que si bien el escribe notas de opinión y análisis tanto en la red como en papel, sus lectores son en gran mayoría “digitales”.

En lo que concierne a la forma de escritura, esta varía según el fin o al público al que está destinado. En el caso de que se trate un blog sobre experiencias, o de humor el lenguaje será más informal que uno sobre política, filosofía o temas más serios.

Resulta difícil establecer si en el futuro estos espacios lograrán competir con las grandes cadenas de medios debido a la reputación de los periodistas que forman parte de éstas (periodistas que en gran parte poseen blogs individuales). También lograr una férrea confianza y veracidad entre los lectores como para suplantar a las corporaciones mediáticas parece ser una tarea complicada, pues, el contrato de lectura formado por algunos medios y cierta parte de la sociedad, la cual comparte léxico, valores, y opiniones, suele estar fuertemente sellada como para romper dicha homogeneidad.

Es por eso que se especula que dentro de algunos años los blogs continuarán reproduciéndose de manera tal que su masividad aumentará en gran medida, pero se estima que no escalarán los suficientes peldaños como para poner en peligro la existencia de diarios (ediciones impresas y digitales), canales, radios, etc., debido a que el hábito de informarse por estos medios ha sido transmitido de forma hereditaria, lo cual implica un cierto arraigo a la tradición establecida.



Maridaje Simpsoniano


Sin la menor intención de caer en lo absurdo o en la informal inconsecuencia, esta revolución digital permite trazar una analogía con la serie Los Simpsons, en la cual en el capitulo llamado “Noticias engañosas” (Fraudcast News), Lisa, la segunda hija de la popular familia, decide crear su propio periódico con el fin de publicar un poema de su autoría, pero al tener tan alta repercusión se ve impulsada a brindar información de forma independiente, procurando huir de las monopólicas garras mediáticas de Mr. Burns. Esta actitud de la joven entusiasta deriva en que la mayoría de los habitantes de Springfield decidan crear sus propios medios, publicando temas de su interés particular, pluralizando las voces, los temas y haciendo honor a la libertad de expresión.

Se puede decir que en la actualidad, la blogósfera cumple esa función, la de proporcionar a las personas la posibilidad de ofrecer información o expresarse sin ningún tipo de restricciones, censura o filtro, convirtiéndose así en sus propios jefes y responsables de lo publicado. Es factible también, adjudicarle este proceso al fenómeno de globalización característico de nuestros tiempos, donde la información se vuelve cada vez más una herramienta fundamental y hasta vital en la toma de decisiones, que a su vez, gracias al mismo efecto globalizador, repercute en todo el mundo generando así una red informática e interdependiente, rodeada de voraces intereses que pueden hacer de estos espacios desde un sitio cultural o herramienta fomentadora de la cultura, hasta una arma capaz de sabotear una campaña política, derrocar a un gobierno o, peor aún, desinformar a la sociedad.

De la gloria a la nada...

Por Damián Duarte //


Génesis de una decadencia    



Las empresas estatales han sido, a lo largo de la historia, punto clave de debates en la sociedad argentina. La actual crisis en la que se encuentran, forma parte del apogeo de un deterioro ocasionado por el acarreo de sedimentos de las malas administraciones, ejecutadas por gobiernos de tendencia neoliberalista.

Las compañías pertenecientes al Estado tienen como fin último brindar parte de sus ganancias a la inversión en la sociedad, es decir, destinar sus ingresos a la mejora de las escuelas, los hospitales y demás beneficios sociales que incluyan a los ciudadanos como dignos perceptores.

Los anales de la historia argentina muestran un cierto magreo, tanto a los recursos naturales de la Nación, como a las organizaciones que los explotan, con el único objetivo de extraerles hasta la última gota de rentabilidad, para luego, al no ser considerada provechosa, cederla al sector privado.

A pesar de poseer todos los suelos, climas, recursos y materias primas, acompañados por un alto desarrollo científico, nuestro país tiene en la actualidad más de 1/3 de la población en condiciones de pobreza. El proceso de privatización (principal causa del índice antes nombrado), que se inició en la década del `70, ha generado una enorme cantidad de concesiones de los recursos naturales a los grandes magnates multinacionales, lo cual trae implícita la posibilidad de recuperación del patrimonio ya que no fueron vendidas y permite mantener viva la esperanza de una patria grande.

El virulento neoliberalismo focalizado en los `90 impulsado por Estados Unidos, llevó en sí mismo el germen de la desindustrialización iniciado en 1970, cuando según la potencia norteamericana, Argentina y Chile debían desarticular su industria para convertirse en proveedores de materias primas.

El Estado, cuyo deber es salvaguardar los derechos de los ciudadanos, ha sido victima de las malas maniobras de los funcionarios argentinos dispuestos a sumirse a las multinacionales en vez de defender a su país, contrayendo así una deuda basada en irregularidades como, por ejemplo, la ilegitimidad del gobierno que la contrajo.

La privatización de YPF, ha marcado un hito entre los errores más groseros de las conducciones neoliberales, dando lugar a graves consecuencias afloradas en los años posteriores.



YPF: Retrospectiva del despojo


Yacimientos Petrolíferos Fiscales, creada en el año 1922 por el presidente Hipólito Yrigoyen y presidida por el General Mosconi, representó la más importante fuente de recursos petrolíferos de nuestro país por varias décadas. Su expansión y exploración fomentó la industrialización del país avalando el proceso de sustitución de importaciones, generando así una serie de avances que dieron lugar a una sucesión de políticas de planificación energética que posibilitaron una gran evolución en el mercado interno.

La explotación del petróleo se inició bajo la presidencia de Roque Sáenz Peña durante el año 1910 gracias a la cual se creó la Dirección General de Explotación del Petróleo en Comodoro Rivadavia. Esto significaba un gran progreso económico debido a que este combustible reemplazaba al carbón importado de Gran Bretaña. Durante el año 1922, ya con Yrigoyen como presidente, debido a irregularidades en la venta del crudo, se reestructuró la Dirección General de Explotación del Petróleo reemplazándola por la Dirección General de Yacimientos Petrolíferos Fiscales, de la cual meses más tarde asumiría Mosconi como Director General.

Mosconi, partidario de la independencia económica y de la industrialización, notó la falta de agua en los yacimientos y la reducida capacidad de las destilerías de Comodoro y Neuquén. Como respuesta a esto y dentro de sus más acertadas medidas se llevó a cabo la electrificación de los yacimientos, la adquisición de barcos petroleros, remolcadores y la construcción de la destilería en La Plata, una de las más grandes del mundo en capacidad de esa época. En paralelo al proyecto de Comodoro se realizaron exploraciones en el resto de la provincia de Neuquén, llegando así a pueblos como Plaza Huincul y Cutral-Có produciendo un gran desarrollo y crecimiento entre sus habitantes, así como también se logró la expansión de las redes ferroviarias logrando un gran avance en materia de transporte.

Durante la presidencia de Perón se sostuvo que YPF no podría abastecer al incesante proceso de industrialización que atravesaba el país, debido a que carecía de tecnología, personal y capacidad. A causa de esta problemática se llego a importar casi el 50% del combustible utilizado. La contrariedad se agravó y el presidente debió entablar negociaciones con Shell, Esso, Standard Oil of California, Petrogas, Petroargentina, Tipsa y Petrofina. El fin de este proyecto era ofrecerle a las empresas la exploración en zonas de riesgo minero, concentrando la de YPF en lugares asegurados. Las empresas debían invertir cerca de 20 millones de dólares en los primeros años y en el caso de no encontrar petróleo se retirarían perdiendo la inversión, en caso de hallar combustible se debía entregar a YPF para su destilación. Esta idea llevaría al autoabastecimiento del país, pero el procedimiento se vió frustrado por el golpe de 1955 que impidió la aprobación en las cámaras del Congreso.

En el año 1973, se produjo una de las grandes crisis del capitalismo, lo que contrajo un fuerte aumento en el precio del petróleo y una fuerte recesion en Estados Unidos y parte de Europa. El motivo de la crisis fue que no se encontraban posibilidades de inversión para las ganancias que otorgaba el petróleo, por ende los bancos, excedidos de dinero, debieron pagar más intereses al dinero depositado que el que les ingresaba.

Durante la última dictadura militar argentina se caracterizó por el engrosamiento de su deuda. La deuda externa argentina creció de menos de 8.000 millones de dólares a más de 170.000 millones provocando la ruina de sector público y orientándolo hacia la privatización. Antes del golpe de 1976, la deuda de YPF era de aproximadamente 300 millones de dólares y al finalizar la dictadura superaba los 6.000 millones, provocando así el despido de 15.000 trabajadores de los casi 50.000.

La década del `90 encontró al país profundamente empeñado y bajo el acecho de un salvaje neoliberalismo con el presidente Carlos Menem a la cabeza y bajo el lema de que “todo lo que pertenezca al Estado no permanecerá en manos del Estado”. El “endeudamiento” y la “no rentabilidad” de las empresas estatales fueron la bandera de este nuevo gobierno, que no escatimó excusas a la hora de entregar el patrimonio del Estado a las monopólicas multinacionales. La ola de privatizaciones sumergió al país en un literal saqueo extranjero. El presidente encargó a la compañía Merryl Lynch la tasación de YPF, que arrojó en su estimación una gran reducción de las reservas petroleras explotables, dando lugar a la disminución del precio de la empresa estatal antes de la venta.

A pesar de haberse desprendido de YPF en 1990 el Estado argentino consiguió un comprador recién en 1998, este adquisidor seria Repsol S.A, una empresa de origen español y de similar pasado privatista que la empresa argentina.

Resulta sorprendente que la compañía que llegó a tener más de 50.000 empleados nucleados por SUPE (Sindicato Unidos Petroleros de Estado), hoy emplee a poco más de 5.000 personas y gane más de 500 millones de dólares por año.

El Decreto Nº 2.778 del Poder Ejecutivo Nacional del 31 de diciembre de 1990 fue el que dio lugar a tal atroz privatización, convirtiendo a Yacimientos Petrolíferos Fiscales en una sociedad anónima, asumiendo el Estado toda la deuda de la empresa. Esta medida fue votada por los justicialistas y por la obsecuencia de la UCR, aún a pesar de la denuncia de Luis Saadi acerca de la coima de 8 millones de dólares en el Senado. Luego de la aprobación el Ministro del Interior menemista, José Manzano, declaró que el petróleo pasaría a manos de las provincias, que YPF cotizaría en bolsa y que todos los beneficios se otorgarían a los jubilados, evidentemente la hipocresía no se hizo esperar.



Presente de YPF y función del Estado


En la actualidad, pleno siglo XXI, podríamos decir que las políticas privatistas se profundizaron, en el año 2006 se aprobó la ley 26.154 que amplía los beneficios impositivos de las petroleras y las gasíferas. La renovación de la concesión del Yacimiento de Cerro Dragón a British Petroleum, Amoco y Bulgheroni es un claro ejemplo de esta realidad.

Tal como lo expresa el cineasta Fernando “Pino” Solanas en su documental Memoria del saqueo, si se aplicara firmemente la ley de hidrocarburos, caerían la mayoría de las concesiones, debido a que las multinacionales extraen de los pozos sin control alguno, mantienen las tarifas más altas del mundo y pagan las regalías de las más bajas.

La estafa al país se inicia desde el momento en que se les regala el valor de las reservas, las instalaciones y los obreros que poseían las plantas, siendo que la mayoría de estas empresas viven del crédito que dejó el Estado argentino en infraestructura.

El desmantelamiento y las fraudulentas privatizaciones que se han realizado sin inventario alguno, dieron lugar a un alto nivel de desocupación, dejando pueblos aislados y desolados, donde uno de los más grandes frutos que dió YPF fue el progreso social que habían alcanzado sus trabajadores en ciudades como Caleta Olivia, Cutral-Có, Comodoro Rivadavia, etc., sin contar el enorme desarrollo de gasoductos, acerias, usinas y caminos.

Las ventajas impositivas, los sobreprecios, las condonaciones de multas, la pesificación de las deudas en dólares, las prórrogas de concesión y los incumplimientos de obras por parte de las empresas son algunas de las tantas aberraciones que cometió el neoliberalismo en Argentina, ausentando al Estado a tal extremo que el proceso de recuperación se fue tornando cada vez más difícil a causa del desarme estructural de las empresas privatizadas y a los enormes pasivos adosados a ellas.

Así como explica Oszlak el proceso de transmutación y subestimación del Estado durante la década del `90, podríamos decir que este fenómeno también se aplica, quizás en menor medida, en la actualidad. La minimización y virtual ausencia del aparato estatal lo ha llevado a una literal reducción de su papel. Este fenómeno no posee nada negativo excepto por el constante saboteo al desarrollo sustentable, a la gobernabilidad democrática y a la equidad distributiva, es por eso que la ausencia del Estado deja ver un incumplimiento de ciertos roles que al no ser asumidos, provocan sistemáticamente el deterioro de las condiciones de vida de los sectores sociales mas vulnerados. Las representaciones estatales no contraídas quedaron a la deriva en el renombrado juego del mercado, condición sine qua non del neoliberalismo, al igual que el papel represivo encarnado por la fuerza estatal malinterpretando las teorías weberianas.

Las funciones del Estado, entre las que se encuentran la regulación de la economía, la distribución de las riquezas, y por sobre todas las cosas, la protección de los sectores sociales mas débiles, han sido durante las ultimas décadas singularmente olvidadas y/o delegadas. Sin embargo, se puede notar una fervorosa presencia estatal en asuntos relacionados con inversiones, así como también facilitar condiciones de trabajo a los grandes empresarios. La limitada participación de los gobiernos a lo largo de la historia se ha hecho notar en actitudes como la de no intervenir frente al despojo y el saqueo de las industrias nacionales y de los recursos, la de aparentar una fuerte presencia ante los poderosos y declarar una lastimosa debilidad frente a los pobres y los más endebles, abriendo cada vez más la brecha existente entre las clases, donde los pobres son cada vez más pobres, y los ricos se enriquecen aún más.