domingo, 16 de mayo de 2010

El periodismo y el control ideológico

Por Damián Duarte //

Es de amplio conocimiento que, en la actualidad, muchos de los respetados periodistas han hecho abuso de su reputación y han derivado en “opinólogos” capaces de criticar cualquier maniobra política, de espectáculos o alguna acción de una persona pública, convirtiéndose en jueces y dueños de la verdad, la ética y la moral.


Días atrás todo el espectro comunicador se vio conmovido con la aparición de ciertos afiches que “escrachaban” a reconocidos periodistas del Grupo Clarín.

Dentro del debate sobre la libertad de expresión, a lo cual no se le debe restar importancia, existe la discusión acerca de la función del periodismo. Es cierto que un periodismo acrítico, tibio o esterilizado pierde su sentido, el problema hace explosión cuando la opinión de alguien “autorizado” en términos comunicacionales, se torna connivente con los intereses del medio al que pertenece, usufructuando así la libertad de prensa, para luego hacerla mutar hacia la “libertad de empresa”.

Tal vez para algunos sea un debate trillado, y hasta haya caducado su vida útil, pero no se debe olvidar que la formación de opinión es una de las piedras angulares del pensamiento crítico.

Resulta interesante no quedarse en lo que presentan los medios, opositores y oficialistas, sacudirse un poco el polvillo informativo con el que nos bombardean a diario y tratar de entablar una reflexión al margen de la lucha de intereses. Por eso cabe preguntarse, ¿es realmente Argentina un país donde peligra la libertad de expresión? Si bien se conocen cientos de casos donde la actividad periodística se vio amenazada y hasta censurada, es honrado reconocer que en ningún tipo de dictadura hubiera sido posible la publicación de un libro como “El Dueño”, más aún en conocimiento a quien está orientada la investigación o pseudoinvestigación. De la misma manera, ya se hubiese extinguido el diario de mayor tirada del país.

Lo mas curioso en lo que se debe reparar es en la hegeliana dialéctica del amo y el esclavo que se desarrolla en torno a esta cuestión. Por parte de los “periodistas independientes”, el discurso que proviene es el de “la dictadura kirchnerista que no tolera críticas”. La actitud de estos sujetos, y es aquí donde radica la dialéctica, se vuelve crudamente intolerante ante el desagrado por parte del poder, cayendo así en un autoritarismo mediático difícil de justificar y mucho menos de evaluar.

Parece difícil creer que se esta viviendo una verdadera dictadura y se le está imponiendo un forzoso límite a la libertad de expresión, tal vez mi necedad “Silvio-rodrigueana” me obligue a pensar que hubieron tiempo peores en el ámbito comunicacional.

Sin embargo, también es válido reconocer que la cruzada contra el monopolio encarnada por el gobierno parece resultar excesiva, no porque carezca de importancia, sino porque a estas alturas, gran parte de la sociedad ya ha podido dilucidar que el discurso siempre va de la mano de los intereses, en ambos bandos.

Lo que se intenta desde este artículo no es imponer un línea de pensamiento, ni abrir los ojos ni contar algo que no se haya dicho antes, sino, apoyándose básicamente en el choque de los discursos, invitar a una reflexión paralela, imparcial y propia que tanto hace falta en estos días.

Estimados lectores, he vuelto.

8 Amigos me gritaron al oido...:

Maloperobueno Gritó:
17 de mayo de 2010, 8:17

Damian

En cualquier sociedad capitalista la libertad de expresión es extremadamente subjetiva y relativa.
El periodismo no es una actividad altruista o humanista, solo comunica con una gran carga ideologica según a que interes represente.

Por otro lado, ayer compre el diario nuevo que salio, a una simple mirada se nota oficialista, con gran cantidad de publicidad oficial y muy poco para leer.
Una pena, pero sirve como muestra de tu post y mi argumento.

Saludos

Alejandro Gritó:
17 de mayo de 2010, 14:39

Volvio la magia.

Yo prefiero decir que en cualquier sociedad la libertad es relativa.

Un abrazo.

Agustín Molina Gritó:
18 de mayo de 2010, 15:09

Buenas tus posturas, y buenos los artículos en el diario (deberías linkearlos para que podamos seguirte!)

Esteban Gritó:
18 de mayo de 2010, 19:41

Suscribo a Alejandro diciendo que en "cualquier sociedad la libertad es relativa" en respuesta a lo dicho por el cumpa maloperobueno "En cualquier sociedad capitalista la libertad de expresión es extremadamente subjetiva y relativa"
Sobre el diario nuevo me alegro ver notas sobre el cierre de Critica y sobre la marcha de los pueblos originarios. Dos temas muy dejado de lados por los medios monopolicos.

Damián Gritó:
19 de mayo de 2010, 11:22

Malo...:definitivamente coincido en que "El periodismo no es una actividad altruista o humanista", y en la mayoria de los casos defiende intereses de quien representa. En fin, todo es interés, todo es lucha de clases...Gracias..

Damián Gritó:
19 de mayo de 2010, 11:23

Ale querido, coincido, pero yo no hago magia, apenas hago ilusionismo...Abrazo!

Damián Gritó:
19 de mayo de 2010, 11:27

Agustñin, se agradece! pero ya no estoy publicando columnas en el diario, como me mudé (si, los abandoné con el bártulo macrista)ahora me acoto a notas locales.Abrazo!

Damián Gritó:
19 de mayo de 2010, 11:27

Esteban, una pena lo de Crítica, gracias por pasar, vuelva pronto!

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